SEÑALES DE HUMO PARA UN ESPÍRITU ALBINO

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viernes, 12 de octubre de 2012

12 DE OCTUBRE DE 1492

12 DE OCTUBRE DE 1492

Las profecías,esas semillas en la mente que sembraron nuestros abuelos,despertaron al fin del sueño. Un extraño mundo se presentaba ante nosotros los indios paganos, adoradores de ídolos en barro. El 12 de octubre de 1492, después de 72 días de navegación, el marinero Rodrigo de Triana divisó tierra firme. 

Cristóbal Colón y su expedición llegaron a la isla que los nativos llamaban Guanahaní, y que Colón bautizó como San Salvador, ubicada en el archipiélago de las Lucayas o Bahamas.Los aborígenes avistaron tres siluetas en el horizonte,eran construcciones de madera nunca vistas, que flotaban en el mar, se veían majestuosas llegando a su destino final. 

Lejos estaban de imaginar que aquellos viajeros, les robarían la sonrisa y en sus cofres guardaban un alma criminal. Navegantes, que con un brillo en la mirada pisoteaban la vida, para obtener todo metal precioso y engañarnos con su falso misterio. 

Atreviéndose a vaciar hasta las tumbas de los grandes señores, que narraron alguna vez la invasión y el despojo. Se murieron los tiempos en que podíamos caminar por la tierra, danzar con los árboles y escuchar de los ríos sus leyendas. Se ahogó el sonido del caracol entre tantos gritos de mujeres y niños, viendo correr ríos de sangre fuera de sus venas. Hombres de piel blanca y barbudos, se adueñaron de toda belleza que la naturaleza pariera. ¡Los dioses nos abandonaron! 

Se apagaron las noches, en que aun éramos dueños absolutos del mar bañadito de estrellas. Una nueva cultura desembarcó feliz de apoderarse de nuevas tierras. La destrucción del imperio llegó y con ella el furor y la codicia arraso toda vida, sin respeto dejándonos en la miseria. Nos convirtió en esclavos, torturaron nuestra dignidad hasta quedar exhaustos. La historia de nuestro continente aun sangra y con las gotas que le quedan, alimentamos las raíces. 

El rescate de nuestra cultura maravillosa hoy recuerda, el día aquel que nos arrancaron el corazón, el genocidio inútil, porque con todo nuestro amor les hubiéramos compartido un lugar en nuestra hermosa América. 

Oralia Lombera Reyes
"Musa Peregrina"
Desde la perla del pacifico Acapulco,México.