SEÑALES DE HUMO PARA UN ESPÍRITU ALBINO

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jueves, 17 de enero de 2013

LA ROSA DEL VOLCÁN

LA ROSA DEL VOLCÁN
Se sabe única la niña de las nieves,flor endémica que crece solitaria, acurrucada en las faldas del Pico de Orizaba. Su belleza languidece ante la mano del hombre,que se adueña de ella arrancándola sin piedad, siendo arrastrada en este río infame de exterminio a la flora y depredación.
Mutilando la naturaleza que se muestra ante sus ojos, radiante en cada una de sus manifestaciones. La rosa del volcán enfrenta un ataque feroz, el peligro es mayor que la lava densa que brota del corazón de un cono volcánico. Se abre un cráter en el tiempo, la rosa autóctona del volcán un día sólo será recuerdo, sus semillas lloran porque débilmente en la tierra ya no logran germinar.
El planeta grita de dolor, ante la impotencia de ver la flora sólo en imágenes virtuales. En cada uno de sus pétalos, habita la memoria indeleble de batallas contra fuertes vientos, no siendo suave y fragante como una rosa de jardín cultivado con dedicación, ella acepta su destino por amor a la creación. Tesoro de enamorados olmecas que en secreto su amor le confiaban, ante el majestuoso "Señor de la niebla" que su rosa dulcemente entregaba.
El volcán adormecido observa el horizonte y se queda perplejo,al sentir la rosa cada día sufriendo al ver a sus hermanas padeciendo. Inexistente comunión entre flora, fauna y hombre el día de hoy. Un planeta que agoniza,el soplo de vida se extingue,todo es devastación. El poeta en sus versos enmudece y de tanto dolor sus letras cantan tristemente.
Cuidemos la rosa del volcán respetando su hábitat, para no lamentarnos un día que esta flor única en el mundo,cierre sus nostálgicos ojos para siempre. Muriendo su silueta soñadora, en silencio la rosa del volcán espera su final, regodeándose valiente en su soledad ancestral...
Musa Peregrina.