Esta noche la luna derramará sexo, ambientado de aromas desconocidos,mientras el cielo aun plagado de estrellas se distrae un poco. Travieso entras en mi ser de golpe, sin pedir permiso de tocar mis brillos, húmedos de permanecer en lo càlido de tu esencia, recostada en la sabana de un instinto generoso. Mis manos han sido moldeadas para recorrer tus caminos de poder, y hacerte sentir hoy menos dominante.
Me subì a tu vagòn y esta noche cariño mío, sòlo yo controlo los viajes. Al amparo de tu mirada paralizada a mi labor placentera, galopas en mis abstinencias con autoridad ilimitada, vas saciando lentamente tu deseo innegable, de poseerme por un instante. Hoy estas inerte tantas veces amor, que tu respiraciòn se fusiona con mi aliento satisfecho. Mis labios te atormentan nuevamente, hasta sentir el fuego de la pasiòn que inventamos, encumbrada en fantasías pendientes de realizar, en mis pètalos de mujer antigua.
Mi alma inventa una rítmica succiòn que te lleva a viajar por todo el universo de tus sentidos, en el tiempo y espacio mismo de la creaciòn y mil pecados. Mi paìs se refugia en tu cuerpo amarrándote a mi espalda, a mis pensamientos. Para así, amarte como yo quiera, hasta llenarme de tus entrañas. Das vida a mi lujuria salvaje y esta noche, le recordaste a la brùjula de mi erotismo, que no existe una historia igual a otra, que se escriba con el Sol ardiendo entre mis piernas. Ahuyentando el frío de mi libido, naciendo mares de orgasmos entre tu cuerpo y el mío. Gracias por prestarme tu piel, viajando conmigo sin miedos,enfrentando juntos el deseo que nos atormenta, por cierto… ¡Qué rico me besas! Musa Peregrina.
Me subì a tu vagòn y esta noche cariño mío, sòlo yo controlo los viajes. Al amparo de tu mirada paralizada a mi labor placentera, galopas en mis abstinencias con autoridad ilimitada, vas saciando lentamente tu deseo innegable, de poseerme por un instante. Hoy estas inerte tantas veces amor, que tu respiraciòn se fusiona con mi aliento satisfecho. Mis labios te atormentan nuevamente, hasta sentir el fuego de la pasiòn que inventamos, encumbrada en fantasías pendientes de realizar, en mis pètalos de mujer antigua.
Mi alma inventa una rítmica succiòn que te lleva a viajar por todo el universo de tus sentidos, en el tiempo y espacio mismo de la creaciòn y mil pecados. Mi paìs se refugia en tu cuerpo amarrándote a mi espalda, a mis pensamientos. Para así, amarte como yo quiera, hasta llenarme de tus entrañas. Das vida a mi lujuria salvaje y esta noche, le recordaste a la brùjula de mi erotismo, que no existe una historia igual a otra, que se escriba con el Sol ardiendo entre mis piernas. Ahuyentando el frío de mi libido, naciendo mares de orgasmos entre tu cuerpo y el mío. Gracias por prestarme tu piel, viajando conmigo sin miedos,enfrentando juntos el deseo que nos atormenta, por cierto… ¡Qué rico me besas! Musa Peregrina.