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sábado, 16 de junio de 2012
EL SUEÑO DE MI AMIGA
La vida tan misteriosa como impredecible nos envuelve en mágia y de pronto nos deja a oscuras. Es así como inicio este relato que mi alma ya más no puede contener. Se vierte en un río de lágrimas y el tiempo lentamente se encarga de beber…Como en un sueño de hace realmente pocos días estabas casi muerta. Caminabas por avenidas del centro del puerto, cuando un instante dentro de tu cuerpo físico enfermó y lo dejó en silencio. Falleciste frente a los ojos de un entierro, con música de mariachi, cantada en el huerto del tiempo fue que nos dijimos adiós. Silencio, mi amiga ya duerme…No sé de tu cuerpo ni que hicieron con él, ya más dolor no podías resistir. Tu alma se quedó a hacerme compañía por las tardes, esas en que me duelen los recuerdos. El eco de mis làgrimas se escucha fuerte para no sentir los sollozos de mi corazón, inevitable adiós que me asusta por un momento y es que aun no me acostumbro a perderte. Te sientas a mi lado en la mesa y yo te percibo a travès del viento. Escucho cada uno de tus secretos, no los sientes pero mi mano derecha siempre está sobre tus miedos para quitarles el valor de sentirse eternos. Aquella tarde de diciembre te fuiste corriendo y te seguí hasta donde mi espacio mortal me permitió por un tiempo. No sabía que ya estabas muerta desde hace miles de años. ¡ Para mi nunca morirás! Por qué eres la rosa que no se doblega ante el viento, la lluvia que se asoma tímidamente a mi ventana cuando me conecto y no te veo. Mi alma se embriaga de dolor, te necesito amiga, te extraño con todo mi corazón.¿Por qué te fuiste? Me quedé sola soportando este frío del invierno, en los años que me quedan sin disfrutar junto a ti el sueño, y reírnos como antes de todo, de ti, de mí… No recuerdo qué pasó el resto de ese día. Pero sí que a la noche siguiente me serviste un té de canela, con una de azúcar màs una sonrisa dulce ese momento con el amor que siempre recibí de ti, aun no partìas, no conocías ese otro mundo que te cuenta hoy sus secretos. Un viaje màgico donde olvidaste el dolor, desesperación, y soledad de tantos dìas. ¿Sabes amiga? Sentì que acariciaste mi mejilla mientras se te escapaba de los labios la promesa de nuestra amistad, fortalecida por la eternidad. Gotas de vida, compañía, infinito respirar sin tu presencia, con luz y mis versos de nostalgia que te guían. El cariño de tu alma luminosa, la paz de tu sonrisa, el frìo que penetra los huesos de quién no olvida. Tú mi resplandor pero sigo triste… Hermana del alma, jugaremos aun desde otra dimenciòn a crecer juntas y me enseñarás de tu sabiduría, trataré de estar cerca de ti mientras Dios nos lo permita. En cada nuevo dìa, con chispas de inmenso amor sobreviviremos eternamente, para ser amigas… La amiga que nunca pensè encontrarme sentada en el parque de la vida. Que me llena de calma, envuelto con una oraciòn mi pensamiento busca en los recuerdos tu sonrisa escondida, para compartirla con la mìa… Te quiero mucho. Nunca olvides que ambas somos la brisa, que refresca con valentía la amistad y camina tomada de la mano de tristezas y alegrìas. Sin prisas, sin pausas y con valor de vivir sin haber muerto , porque los seres de luz, no mueren cualquier dìa . Ellos marchan al frente del sol portando instantes, que laten en el aroma de una flor y suavizan el sendero de nuestros mejores días. Musa peregrina.