"EL ARTE DE ENSEÑAR A BAILAR"
-LIBRO ENTREVISTA- a Cessar Hernandez
POR Sergio Armin Vásquez Muñoz
PRÓLOGO
Oralia Lombera Reyes
"Musa Peregrina"
Escritora guerrerense.
La noche de anoche, en algún salón de la ciudad de Xalapa, se escuchó el timbal de un corazón enamorado y triste. Entre gotas nostálgicas de lluvia, el alma de la luna ejecutó alegremente la percusión. La armonía de las estrellas desató por un instante cuerdas que enamoraron el cielo y el grisáceo de su desvelo. El ritmo vibrante se hizo presente en el bongó y el cencerro. Las parejas y sus ilusiones bailaron hasta el amanecer.
El movimiento corporal es el primer paso para ejecutar cualquier baile. Conocido es que desde la antigüedad se utiliza como medio de expresión en rituales, ceremonias, en tradiciones religiosas o como preámbulo de guerra.
En la presente entrega de la “Colección Artífices”, compartimos la entrevista realizada a Céssar Hernández, maestro de baile, básicamente de salsa. Hombre de trato sencillo, carismático, observador y respetuoso, se presenta dispuesto a confiarnos la fórmula de su sueño. Creó un método de enseñanza para el aprendizaje del casino, con técnica propia, exigencia y concentración, basado en que la teoría de la repetición no es el único requisito para ser buen bailador y sobresalir.
Nos narra que hay personas y profesores que han hecho lo mismo toda la vida y eso no significa que lo hagan bien, ya que existen hábitos a desarrollar para hacerlo más que bien.
Todos los campos del quehacer humano deben ser acompañados de connotaciones positivas, como el optimismo, los deseos de éxito, la innovación frecuente, la eficiencia individual y grupal, el progreso continuo, la voluntad, que en conjunto son recursos que garantizan el triunfo, con la finalidad implícita de realizar y transmitir sueños con autonomía y al mismo tiempo con fortaleza.
Por su parte, el acto de aprender a bailar coadyuva a acentuar habilidades y aptitudes, tales como la tenacidad, la
creatividad, la destreza, y por supuesto fomenta la disciplina, lo que lo equipara con cualquier deporte. En este sentido, el baile también te pone en la ruta de una buena condición física.
Realizando movimientos a la par de la música, también se desarrolla el oído musical, se marca, se aprende y se respeta el ritmo de una coreografía individual o grupal.
Céssar Hernández nos muestra su camino: las muchas horas de aprendizaje y rigor mental consiguen en algún momento doblegar el cuerpo, para que se relaje y tome por la cintura a aquel deseo perenne de moverse en orden y en total coordinación y equilibrio. Es así como, conectando los cinco sentidos, es capaz de transmitir su enseñanza a quien desee aprender y lograr naturalidad y fluidez. El maestro Céssar también consigue hacer bailar una por una sus emociones.
En la Academia Ponte N’Klabe, sus alumnos descubren que la salsa es gran amiga y compañera de quienes lloran y al mismo tiempo celebran. Conectan mente y cuerpo. Se entregan a ojos cerrados. Y en la fiesta de la vida, jamás se quedan sentados, se levantan de su silla, caminan con la mirada fija en aquella sensación que los apasiona, la toman de la mano y, decididos, se dirigen hacia el centro de la pista.
ORALIA LOMBERA REYES
“MUSA PEREGRINA”
ESCRITORA GUERRERENSE