¡TIERRA A LA VISTA!
Qué maravillosa sorpresa ha sido encontrarte después del naufragio. Eres ese barquito que navega sin temores hacía mi desolada playa. Creo que no hice mucho para merecerte. Algunas ocasiones me pregunto si eres real.
Ayer que te miré intentando hacerme sonreír,secando mi llanto con caricias y abrazos a mi alma errante. Supe que te quedarás. Pasaron muchos años para conocerte,para sentir la fuerza de tu abrazo de oro. Se que haces un esfuerzo para sostenerme, y no romper de golpe el portón de aquel viejo castillo del que te he contado.
Ayer que te miré intentando hacerme sonreír,secando mi llanto con caricias y abrazos a mi alma errante. Supe que te quedarás. Pasaron muchos años para conocerte,para sentir la fuerza de tu abrazo de oro. Se que haces un esfuerzo para sostenerme, y no romper de golpe el portón de aquel viejo castillo del que te he contado.
Refugio de mis temores arcaicos y noches en vela en que las sombras me aterraron,con polvorientos baúles abiertos,en donde han dormido por siglos mis sueños frustrados.
Gracias por darme tiempo,gracias por aceptarme con los trozos de mi corazón aun sin pegar. Gracias por zurcir mis arterias con besos pausados,mirándome a los ojos y sintiendo la tersura de mi mejilla como me has dicho esta tarde de agónico verano.
Gracias por darme tiempo,gracias por aceptarme con los trozos de mi corazón aun sin pegar. Gracias por zurcir mis arterias con besos pausados,mirándome a los ojos y sintiendo la tersura de mi mejilla como me has dicho esta tarde de agónico verano.
Se que el tiempo se llevará muchas cosas de mi alma, no se a donde pero sucederá. Y este corazón de gaviota herida, será tuyo por completo, gozando de plena libertad. Siento muchas veces que escribo en el aire y la brisa te hace llegar el eco de mi espíritu aun sollozante. Imagino que somos iguales no de hoy ni de mañana y si de algún mundo maravilloso en que tú y yo eramos dos árboles, dos ciudades,dos lagos,dos alas volando sin temor a equivocarse.
Gracias por besarme con palabras,por darme respiración de boca a boca y resucitar mis letras,para poderle expresar al mundo mi querer. No me dí cuenta en que momento dejé de ser peregrina y musa,hoy soy feliz siendo tuya sin nombres,ni etiquetas,solo con un puñado de sueños en mis bolsillos,amándote así,con la fuerza de tu agua de Río que llegó en silencio a salvar mi mar...
Musa Peregrina.