UNA NOCHE MÁS
Ayer escuchaba el sonido
de paz,que brota tras la montaña de mi alma, y
compartí nostalgias, hasta entrada la madrugada.
Sentí que el tiempo de las siembras y cosechas
en silencio de mi vida se alejaban, que las cicatrices
ya están cerradas y la bruma de la ausencia
ha quedado atrás.
Solté mis golondrinas y voces que ansiaban volver,
para amar el rugido del viento...!Pobrecillas!
Las mantuve enjauladas por mucho tiempo.
Ya no insistí en desatar mi nudo de recuerdos,
de aquel tiempo en que mis sentidos no razonaban.
Arranqué de golpe el salado de mis lágrimas,
que eran ya parte del olvido, y lloré dando
gracias a la vida.
Sé que tengo restos de sentimientos aun cautivos
que se refugian en mi memoria, insaciables
enemigos de mi serenidad y la alegría de mis latidos.
La noche de anoche bebí muchas copas de dolor,
brindando con sentimientos desertores,
,los últimos guardianes de mi corazón.
A la luna le narré mis hazañas, le escribí una carta
y ella supo que crecí,morí y resucite
amando el mismo sueño.
Mi mente dolida antes fue incapaz de expresarse,
no comprendía que el amor es punto y aparte,que
la atracción física y el sexo son dos vasos de agua,
que sacian temporalmente las ganas de amar.
La cama es testigo del juego insano de la piel,
que desgarra su vestido manchado
de pudor y ansiedad.
La poca voluntad nutre los instintos hasta envejecer,
y en el trayecto se hace vicio fornicar.
A ratos escuché mi risa loca, y lloró mi alma
creyendo que el consuelo nunca llegaría.
El destino se recostó confundido a mi lado,
acariciando mi soledad, pero no me engaña,
sé que lo excita el barro y mi respiración.
Llegó el amanecer,me desconecté y salí a vivir ...
Oralia Lombera Reyes
"Musa Peregrina"
Desde la perla del pacífico Acapulco,México.
Ayer escuchaba el sonido
de paz,que brota tras la montaña de mi alma, y
compartí nostalgias, hasta entrada la madrugada.
Sentí que el tiempo de las siembras y cosechas
en silencio de mi vida se alejaban, que las cicatrices
ya están cerradas y la bruma de la ausencia
ha quedado atrás.
Solté mis golondrinas y voces que ansiaban volver,
para amar el rugido del viento...!Pobrecillas!
Las mantuve enjauladas por mucho tiempo.
Ya no insistí en desatar mi nudo de recuerdos,
de aquel tiempo en que mis sentidos no razonaban.
Arranqué de golpe el salado de mis lágrimas,
que eran ya parte del olvido, y lloré dando
gracias a la vida.
Sé que tengo restos de sentimientos aun cautivos
que se refugian en mi memoria, insaciables
enemigos de mi serenidad y la alegría de mis latidos.
La noche de anoche bebí muchas copas de dolor,
brindando con sentimientos desertores,
,los últimos guardianes de mi corazón.
A la luna le narré mis hazañas, le escribí una carta
y ella supo que crecí,morí y resucite
amando el mismo sueño.
Mi mente dolida antes fue incapaz de expresarse,
no comprendía que el amor es punto y aparte,que
la atracción física y el sexo son dos vasos de agua,
que sacian temporalmente las ganas de amar.
La cama es testigo del juego insano de la piel,
que desgarra su vestido manchado
de pudor y ansiedad.
La poca voluntad nutre los instintos hasta envejecer,
y en el trayecto se hace vicio fornicar.
A ratos escuché mi risa loca, y lloró mi alma
creyendo que el consuelo nunca llegaría.
El destino se recostó confundido a mi lado,
acariciando mi soledad, pero no me engaña,
sé que lo excita el barro y mi respiración.
Llegó el amanecer,me desconecté y salí a vivir ...
Oralia Lombera Reyes
"Musa Peregrina"
Desde la perla del pacífico Acapulco,México.
